Galletas de sabor dulce y picante y de larga duración, fuertemente condimentadas con especias. Deben su durabilidad a la elevada proporción de especias, por un lado, y a su dureza y sequedad, por otro. Pueden almacenarse durante varios meses en un lugar frío y seco.
Las especias utilizadas dependen de la receta y de las tradiciones regionales. Después de hornearlos, los panes de jengibre deben humedecerse y, por ejemplo, recubrirse de chocolate para que sean suaves y duraderos.
Para la producción de este tipo de galletas, se utilizan máquinas de "rodillos", que prensan las formas desde un cilindro formador. En estas máquinas es posible obtener galletas de formas y diseños muy variados, con relieves, dibujos, marcas, etc., en función de las necesidades específicas del cliente.
El producto requiere ser rociado, recubierto y/o espolvoreado y, finalmente, enfriado.
Dependiendo de la cantidad requerida, el producto puede obtenerse en máquinas estacionarias que formarán su forma a partir de un cilindro, por ejemplo:
- Rollos AP con alimentador automático de hojas
- Duomax M400
Si busca un rendimiento elevado, por ejemplo de 500 a 1000 kg/h, le sugerimos una versión industrial de una máquina de rodillos que dispensa el producto directamente en la cinta de un horno de túnel.
Para pulverizar, rociar, espolvorear y enfriar se puede utilizar:
- Aspersor/rociador
- Máquina de templado HCM
- Rociador integrado
- Túnel de refrigeración HCT para chocolate